Arenas y reuniones en Washington: los casos Penta, Caval y SQM “estuvieron absolutamente ausentes”

"Muy productivas y fructíferas". Así califica el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, las tres jornadas de trabajo que sostuvo con representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano del Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM) en el marco de la cumbre que congregó en Washington a autoridades económicas del mundo el fin de semana pasado.

La agenda del titular de las finanzas públicas estuvo recargada durante su paso por la capital estadounidense, donde se entrevistó con sus pares de la Alianza del Pacífico -México, Perú y Colombia-, el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner, con el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, y el vicepresidente del BM para la región, Jorge Familiar, entre otras autoridades.

En entrevista con DF desde Washington, el secretario de Estado aborda la coyuntura marcada por el fuerte recorte a las proyecciones del FMI para Chile y el impacto de los casos Penta, Caval y SQM en la reputación del país.

- ¿Cuál fue la opinión que recogió de Chile?
- En todas las reuniones en que estuve tanto en el BID, el Banco Mundial como en el FMI pude comprobar que el prestigio de Chile, la marca Chile en el contexto de Latinoamérica, sigue bien situado. En la Alianza del Pacífico, la voz que está teniendo el gobierno chileno en términos de propuestas, de cómo avanzamos en una institucionalidad y las temáticas a trabajar, ha sido escuchada.
Y en lo que se refiere a las proyecciones económicas, el FMI ha colocado a Chile como ejemplo y diferenciándolo respecto a otros países de la región en términos de estar en una senda distinta de crecimiento.

- Este viaje coincide con el fuerte recorte de las estimaciones de crecimiento de parte del FMI para Chile, desde 3,3% a 2,7%, por debajo de lo que espera Hacienda.
- Efectivamente, para América Latina hace una proyección moderada (0,9% este año), donde destaca a tres países: Chile, México y Perú, que se ubican en una senda de crecimiento por sobre el resto de la región.
Para nosotros, en todo caso, las proyecciones que hoy está haciendo el Fondo están absolutamente en línea respecto de lo que hemos destinado para 2015 en el actual escenario. ¿Qué hemos dicho? Que este año la economía crecerá por lo menos un punto más que 2014, por lo que estará en torno a 3% y que, básicamente, también es confirmada por la proyección que realizó el Banco Central en el IPoM, que pone un rango de entre 2,5% y 3,5%.

- ¿No les sorprendió esta rebaja por debajo del 3%?
- Es importante entender los rezagos que hay en este tipo de proyecciones. El FMI proyectó 1,8% de crecimiento para Chile en 2014 y el país finalmente creció 1,9%. Por lo tanto, la cifra que dan para 2015 también tiene rezago respecto a la información que hoy tenemos en el país. Hoy, en el país está bastante instalado que el crecimiento estará en torno a 3% y claramente a lo que estamos llamados todos en el sector público y en el sector privado es a trabajar por ese objetivo.

- El Fondo dijo en su informe que existe un impacto de las reformas en la actividad. Usted ya cumplió un año en el gobierno. ¿Reconoce que las reformas han impactado la economía?
- Para nada, no estuvo en el diagnóstico ni en el debate que tuvimos con el equipo del FMI. De hecho, el Fondo dice que hay que avanzar justamente en reformas estructurales para tener un crecimiento sustentable y sostenido y compartir los beneficios del crecimiento. Y lo que hemos estado haciendo es actuar con responsabilidad para financiar nuestro programa con una reforma estructural al sistema tributario. Estamos avanzando decididamente en la reforma a la educación, que tiene una inversión en capital humano que significa en el mediano plazo aumentos de productividad y un crecimiento más sustentable en el tiempo.
En ese sentido, lo decimos con bastante convicción: claramente para avanzar en un crecimiento inclusivo, Chile requiere avanzar en forma decidida en reformas estructurales que enfrenten la desigualdad y que, además, generen aumentos específicos en productividad y capital humano.

- Entonces, ¿usted descarta tajantemente que las reformas incidan en la desaceleración?
- Sigo manteniendo la misma opinión que tenía el año pasado. En el debate que tuvimos en el FMI y con todos los ministros de Finanzas de la región nunca estuvo este tema.

- Generó mucho ruido lo que dijo el Fondo respecto a las reformas y se interpretó como una señal de que le estaban quitando apoyo a algunos proyectos del gobierno.
- No. Y no solo no lo veo así, sino que lo que me ha pasado en estas reuniones con el FMI y el Banco Mundial, es justamente todo lo contrario. Hay tres economías que están siendo relevadas por el FMI para la región, que tienen una senda de crecimiento distinta y que han enfrentado la desaceleración en forma ordenada, sana, con estabilizadores automáticos, con políticas monetarias expansivas y con políticas fiscales contracíclicas. En ese contexto, estamos siendo un ejemplo para la región. Es decir, lo que he podido ver en Washington es todo lo contrario.

- Usted plantea que la seriedad del país no se ha visto cuestionada. Pero en Chile hay quienes plantean que escándalos como Penta, Caval y SQM afectarían la reputación del país. ¿Ha percibido algo de eso en sus reuniones?
- Para nada, esos casos estuvieron absolutamente ausentes en las reuniones. Lo que no significa que no tengamos que avanzar en forma decidida en elevar los estándares de ética y transparencia y en el fortalecimiento institucional en Chile, considerando las propuestas que hará la comisión Engel, para contribuir a un clima de confianza y velar por las expectativas, a fin de que se consolide la incipiente recuperación que hemos tenido en los primeros meses del año, que sustenta el cauteloso optimismo que estamos viendo en nuestra economía.
En ese sentido, reitero que -en todas las reuniones en que he estado participando- el valor de la marca Chile y lo que hicimos para enfrentar la desaceleración el año pasado está siendo visto como ejemplo y con mucho interés de parte de muchos ministros de Finanzas, quienes me han solicitado bilaterales y reuniones para conocer la experiencia chilena y los instrumentos con que contamos.

- ¿No se le consultó por ninguno de estos temas durante sus tres días en Washington?
- Nada, esos temas estuvieron absolutamente ausentes en el BID, en el Banco Mundial y en el FMI.

- El Banco Central señaló que si bien el escenario de actividad estaba en línea con lo planteado en el IPoM, la inversión se mantenía débil.
- El dato económico más relevante del último mes fue la menor inflación y ese fue el tema central en la última reunión de política monetaria. El debate más importante en esa reunión fue la inflación, no la inversión. Se reafirmó, una vez más, que las expectativas de inflación están ancladas en 3%, y hay buenas noticias en relación a este gradual acercamiento a ese rango meta.

"Michel Jorratt tiene mi absoluta confianza"
- La semana pasada se ratificó al director de Impuestos Internos, lo que llamó mucho la atención ya que se realizó luego de que señalara que a la fecha no hay antecedentes para querellarse contra políticos. ¿No hubiera sido mejor esperar a que se diluyeran los casos Penta-SQM?
- El cargo de director del SII está en el sistema de ADP. Se hizo un concurso como correspondía, a través de los procedimientos preestablecidos y con total transparencia. Como parte de ese proceso, la presidenta de la República tomó la decisión de confirmar a Michel Jorratt en la dirección del SII. Michel ha desarrollado un trabajo conforme a la Ley Orgánica del SII y con autonomía en la fiscalización, donde ha avanzado con bastante eficiencia y transparencia.
- ¿Él goza de su plena confianza en el cargo?
- Absolutamente. Michel Jorratt tiene mi total confianza. La tuvo cuando asumió en marzo de 2014 y la mantiene hoy. Hay un total respaldo a su trabajo. No ha habido nunca ninguna duda al respecto.

Arenas abordó el tema con Alejandro Werner (FMI): "El PIB potencial no debe tener un sesgo procíclico"

- El Fondo plantea dudas de que el país alcance el balance estructural a 2018. ¿No sería mejor flexibilizar esa meta?
- Tenemos una meta de política fiscal que es alcanzar un balance estructural a 2018 y, hasta la fecha, hemos reiterado aquella meta. El debate que se desarrolló acá no tiene que ver con la meta de Chile, sino con si la metodología utilizada para calcular el PIB potencial tiene o no un sesgo procíclico. Y de ser así, se debe estudiar. Porque lo que se ha concluido acá es que no debería tenerlo y, al parecer, lo está teniendo.
Este es un debate muy importante para Chile, ya que esta es parte de las materias que que estamos considerando en nuestros diagnósticos preliminares y en el debate de la nueva Ley de Responsabilidad fiscal, que discutiremos el segundo semestre de este año en el Congreso.

- Pero el FMI dice que es poco probable alcanzar el balance de las cuentas fiscales el 2018.
- Eso no es lo que el FMI está diciendo. Eso lo conversamos con el FMI: no está diciendo que dude de que podamos alcanzar la meta del balance estructural. Lo que el Fondo plantea es cuál podría ser la meta fiscal más óptima para Chile en los próximos cuatro años dado los supuestos macroeconómicos para el período. Y es parte de las materias que quedamos de conversar con ellos, pero mantenemos nuestra meta de alcanzar un balance equilibrado en el Presupuesto 2018.

- ¿Qué acordaron sobre la metodología del PIB potencial?
- Justamente, fue opinión del FMI que la metodología del PIB potencial no debería tener un sesgo procíclico y esa es una materia que se debe analizar.
Que el PIB potencial pudiera tener un sesgo procíclico es algo que obviamente debemos enfrentar no sólo en la región, sino pensando en el debate en Chile. Hemos coincidido con el FMI en esta materia y seguiremos trabajando con ellos en este punto.
La metodología del PIB potencial no debe tener un sesgo procíclico y avanzaremos en esa línea.